Group C
Group C
Esta atípica temporada 2021 se acerca a su final con la disputa de la última carrera al sprint antes de la esperada resistencia con los Grup 2 by BRM del día 18/12. Muestra de lo que decíamos es que la categoría que echará el cierre estaba inédita aún en lo que va de año, ya que las dos carreras anteriores tuvieron que ser canceladas a causa de la situación sanitaria.
Pero al fin llega el momento, y no despediremos el año sin haber saboreado las prestaciones de estas formidables máquinas, que disputaron el mundial de resistencia desde principios de los ochenta hasta entrados los noventa.
TIM COMARCA os invita a la tercera carrera de Group C Legends el próximo viernes 10 de diciembre de 2021.
CRÓNICA Y FOTOS (por Daniel Bisbal)
Extraña situación: la última carrera de Grupo C de la temporada era en realidad la primera, puesto que por culpa de la situación sanitaria estos formidables coches no pisaban la pista desde julio de 2020.
Tal vez por ello, por el olvido al que habían sido condenados por el puñetero virus, la respuesta fue tibia, y solo 10 pilotos respondían a la convocatoria. De ellos algunos modelos eran de nueva factura, como el Nissan R90 de Eingel, el Mazda 787B de Canito, el Peugeot 905 de Norrman, un coche caro de ver en las parrillas de Grupo C, y los Sauber-Mercedes de Albert, Mate y Papitu, siendo este último él único con carrocería de plástico inyectado.
Entre los ya conocidos, el Porsche 956C de Bixball, el Jaguar de Marc y los Sauber C9 de Russi y el Dr. Slump, es decir que media parrilla estaba copada por el coche suizo.
En cuanto a los chasis, algo más de variedad: tres ejemplares del PSI Legends, contra otros KST Legends, un ACME, un anacrónico Plafit Super-24 LMS, un Macchinine y un interesante DMT-APR.
Con tan pocos coches las verificaciones fueron rápidas y se dejó todo preparado para acometer la manga cronometrada por el carril 5. Pero antes se procedió a dar cuenta de la opípara cena preparada por Mate, que repitió su apreciada oferta de Truita de camagrocs, o las siempre seguras (pero flatulentas) Seques amb botifarra, entre otros.
Risas, helados, café, copa y al lío. Cabe decir que la superficie de la pista había sido acondicionada por un equipo de aprendices de brujo, cuya alquimia resultó en un cierto exceso de adherencia que condicionó el comportamiento de los coches. En tales circunstancias ningún piloto logró bajar de los 11 segundos, cuando lo habitual en estos coches eran dieces bajos y medios.
El que mejor provecho sacaba de la situación era un sorprendente Eingel que clavaba el reloj en 11,012", mientras a sus espaldas el Dr. Slump y Norrman terminaban por este orden separados por solo 4 milésimas. Las espadas estaban en alto. No menos sorprendente el cuarto lugar logrado por Bixball, y completaba el Top 5 el Sauber de Mate pero con ciertas reticencias sobre si sería capaz de mantener el nivel de la pole a ritmo sostenido.
Tras la crono la competición quedaba configurada en dos carreras de 5 pilotos. Ningún pilotó de los que tocaba abrir pista expresó el más mínimo temor, estaba claro que ello no iba a suponer problema alguno dado el elevado grip presente.
A diferencia de las últimas ocasiones esta vez si hubo mezcla, y algunos pilotos de la primera carrera se inmiscuyeron entre los de la segunda en la clasificación. Lo narramos a continuación.
El farolillo rojo fue el bueno de Pep, que tenía en contra todos los factores. Pese al exceso de grip y al elevado peso de su carrocería de plástico inyectado consiguió rebasar las 200 vueltas. A continuación terminaba Albert, cuya lejana residencia le impide ser más asiduo y acumular kilómetros en pista, pero bueno, este año ha podido asistir a tres carreras, todo un record.
Mate era el siguiente clasificado tras una muy irregular carrera, en la que le pasó factura la bisoñez de su coche. De errático comportamiento, fue un misil tierra-tierra en pista, pero no por sus prestaciones sino porque impactaba a menudo contra sus vecinos de carril, llevándoselos puestos. A coche prestado Marc hizo lo que pudo tratándose de su primera carrera con los Grupo C (yo solo he venido a cenar, repetía).
Siguiente peldaño para el Dr. Slump, esa vez en modo noche aciaga, y pese a su buen resultado en la crono le faltó claramente ritmo de carrera. Eso le puso a tiro de Canito, que estrenaba el Mazda con un muy digno rendimiento que lo aupaba al Top 5.
Delante suyo terminaba Norrman, en una posición que debería haber sido indiscutiblemente mejor, como demuestran sus cinco vueltas rápidas, pero se le soltaba el tornillo de la suspensión trasera. La obligatoria parada en boxes tras recolectar las piezas extraviadas por la pista le suponía un buen puñado de vueltas perdidas, y aunque imprimía un ritmo endiablado después de la reparación la victoria ya no estaba a su alcance.
Y entramos en podio con el Sauber de Russi, que sin hacer ruido iba escalando posiciones que le llevarían no solo a ganar holgadamente su manga sino permitiéndole entrar en la zona noble.
Y delante hubo emoción. Eingel lo estaba bordando con su rapidísimo Nissan. Incluso en la pista 6 que normalmente se le atraganta, conseguía esta vez una renta de 42 vueltas (igual que Norrman) y firmaba la vuelta rápida. Por detrás Bixball lo estaba dando todo con el Porsche, pero era evidente que el ritmo del de Terrassa era claramente superior. Sin embargo en la última manga pareció posible el sorpasso. Corriendo por la aparentemente fácil pista 3 Eingel lo tenía todo a favor para mantener su ventaja, pero empezó a ser chivo expiatorio de accidentes ajenos y su ventaja se fue reduciendo. Los nervios en los últimos compases se esfumaron cuando al corte de corriente mantenía su posición por una vuelta.